A pesar de los 9.630 kilómetros que las separan geográficamente, Auckland en Nueva Zelanda y Valparaíso en Chile comparten más similitudes de las que se podría pensar. Más allá de contar con puertos marítimos y de ser sedes de las Armadas de sus respectivos países, estas ciudades también se destacan por su riqueza cultural, convirtiéndose en atractivos destinos turísticos de renombre.
Sin embargo, la relación entre Auckland y Valparaíso va más allá de las características superficiales. Ambas ciudades albergan prestigiosas instituciones académicas, como la Auckland University of Technology (AUT) y la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), respectivamente. Estas instituciones han establecido vínculos estrechos mediante acuerdos de colaboración que promueven el intercambio de conocimientos en diversos ámbitos, incluyendo la academia, la investigación y el intercambio estudiantil.
En este contexto, recientemente tuvo lugar la visita de Guy Littlefair, vicerrector internacional y decano de la Facultad de Diseño y Tecnologías Creativas de la AUT, a la PUCV los días 17 y 18 de agosto. Durante su estancia, se reunió con el rector de la PUCV, Nelson Vásquez, así como con Orlando de la Vega, director general de Asuntos Internacionales de la universidad, y con distinguidos académicos locales. La visita también incluyó una exploración de la Ciudad Abierta Amereida y contó con la presencia del embajador de Nueva Zelanda, Michael O’Shaughnessy, quien tuvo la oportunidad de conocer el trabajo desarrollado por la Escuela de Arquitectura y Diseño de la PUCV.
Guy Littlefair destaca la afinidad de intereses entre la PUCV y la AUT en términos de desarrollo e investigación. Además, resalta la exigencia académica de la PUCV y su destacada posición regional, elementos que se alinean con la visión de la AUT y que establecen un sólido terreno para una colaboración fructífera y fortalecedora entre ambas instituciones.
La cálida acogida brindada por la PUCV a los académicos de la AUT es un indicio alentador para una alianza prometedora en el futuro. Esto cobra aún mayor relevancia considerando el papel fundamental de la internacionalización en una universidad de alcance global como la PUCV. Las similitudes que emergen de esta relación bilateral auguran un horizonte enriquecedor para ambas instituciones y para la educación superior en general.
